WordPress.
Ya decía en la página Sobre mí que para un viejo programador de cobol, que usaba una metodología de programación estructurada, la relación que me encontré entre plantillas, gadgets, páginas, entradas y etiquetas como elementos de organización del blog de Blogger no me acabó de convencer.
Tampoco me convencía la filosofía de presentar siempre las entradas sobre un tema (educación, gestión,… etc) en orden cronológico inverso.
En algunos casos, cuando las cuestiones tienen un desarrollo largo y relacionado, quiero presentarlas por capítulos, en el orden en que han sido escritas, para una mejor comprensión global de lo que se propone.
Comencé por tanto a darle a Youtube y a ver vídeos sobre WordPress y qué diferencias tenía con Blogger.
Una visión bastante completa es la que ofrecen la serie de vídeos que conforman el curso de WordPress de un señor que se llama David Cuesta (eskerrik asko David)
https://chorri.club/curso-wordpress-gratis/ .
Las opciones de personalización de los temas, los menús, las categorías, los plugins (módulos que prácticamente hacen de todo) y los editores de entradas y páginas me hicieron ver que WordPress ofrece muchísimas posibilidades de mejorar sustancialmente el blog que había realizado con blogger.
No obstante, de entrada, me quedé con una serie de dudas que después se han ido aclarando.
- Que WordPress.org mejor que WordPress.com. De entrada no lo entendía muy claramente.
- Que hay que tener un dominio.
- Que si hace falta un certificado SSL
- Y sobre todo ¡¡Qué hosting escoger!! Parece que mejor de pago que gratuito, pero hay cantidad de hostings. ¿Cuál es mejor?
Fueron varios días volviéndome loco con el asunto del hosting y del dominio.
Vi cantidad de vídeos sobre cómo instalar wordpress.org y cuáles son los mejores hosting según unos y según otros y estuve a punto de renunciar .
Para las cuatro tonterías que yo pensaba escribir la cosa se complicaba muchísimo.
Hasta que se me encendió una luz en uno de ellos, cuando el autor planteaba que porqué no lo instalaba en local.
Eso evitó la renuncia y me hizo continuar para comprobarlo.